El abuelo Filemón. Cuento corto acerca de los abuelos para niños

¿Cómo serán los abuelos ante los ojos de un niño de 5 años? De eso trata El abuelo Filemón, un cuento corto acerca de los abuelos para niños, en el cual se plantea justo esa premisa, ya que para ellos son los superhéroes que todo lo pueden. Seguramente lo disfrutarán mucho. No te pierdas este tierno y emotivo cuento corto, en donde un niño nos habla de su abuelo y nos sirve para darnos cuenta del importante papel que desempeñan dentro de la familia y del imborrable recuerdo que dejan en cada uno de nosotros.

El abuelo Filemón, un cuento corto dedicado a todos los abuelos

Mi abuelo es viejo viejísimo. Cuando le pregunto:

- Abuelo, ¿cuántos años tienes?

Se le ponen las arrugas de punta y dice:

- ¡Tropecientos!

Yo no se cuántos son tropecientos. Solo se contar hasta mil. Deben ser muchos más. Pero con sus tropecientos años y todo, el abuelo Filemón se pone las botas de agua, coge el retel y me dice:

- ¡Venga, vamos a pescar cangrejos!

Y nos ponemos en un puente del río a bajar la cuerda. Si viene un policía a regañarle, pone esa cara que pongo yo cuando mamá me pilla comiendo galletas a escondidas... ¡y le funciona! El policía le perdona y siempre termina diciendo:

- Venga Filemón, pero que sea la última vez ¿eh?

Y al día siguiente, vuelve a decirle lo mismo.

Mi abuelo Filemón me lleva de paseo por caminos preciosos; me cuenta batallitas de la guerra, y si vemos moras gordas en la zarza, me aúpa para que pueda cogerlas.

Le gusta matar moscas con un palo muy largo y cuando tiene que leer se acerca mucho a las hojas y las gafas se le van escurriendo hasta la punta de la nariz. También le gusta mucho hablar con la gente y cantar canciones muy antiguas.

Pero a veces se queda embobado mirando el cielo y se le pone la cara muy triste.

Un día le pregunté al abuelo que por qué era tan bueno. Me dijo que si eres bueno te van creciendo unas alas. Que no se ven, pero que están ahí, y con los años se van haciendo grandotas y van pesando. Y que llega un momento que pesan tanto que ya no puedes andar y tienes que volar.

Ahora entiendo por qué el abuelo Filemón mira tanto al cielo. Seguro que por allí revolotea la abuela Luisa. Qué ganas tiene de irse el abuelo Filemón con ella para comer una de esas paellas ricas ricas y cambiar tajaditas de pollo por arroz. Y es que a listo, a mi abuelo Filemón, no le gana nadie.

La influencia que tienen los abuelos sobre los niños

Los abuelos juegan un papel muy importante para los nietos, aportando una influencia única a lo largo de su vida, ya que suelen ser una fuente de amor incondicional y apoyo emocional, que ayuda a mejorar la autoestima y el bienestar de los niños. Como los abuelos tienen más tiempo y paciencia para dedicar a los niños, esto les permite enseñar habilidades sociales y compartir su sabiduría.

Los abuelos también aportan una perspectiva histórica única a la vida de sus nietos, ayudándoles a entender y a apreciar sus raíces familiares. Los niños tienden a aprender de sus abuelos acerca de cómo era la vida en el pasado, lo mucho que ha cambiado a través del tiempo y lo que puede ayudarles a apreciar más lo que tienen hoy, tanto material como sentimentalmente.

Por último, los abuelos pueden ser grandes modelos a seguir para sus nietos, demostrando los valores esenciales como la amabilidad, la empatía, el amor, la paciencia, la tolerancia y el respeto. A través de su comportamiento, los abuelos enseñan a los niños cómo deben tratar a los demás y cómo ir por el mundo de una manera ética y respetuosa, sin importar la situación en la que estén.

Algunas actividades divertidas que los nietos pueden hacer con los abuelos

Pasar tiempo con los abuelos con algunas actividades, no solo fortalece el vínculo que ya está, sino que refuerza el amor y la convivencia, aquí unas sugerencias:

• Cocinar juntos los platillos favoritos. Los abuelos suelen tener muchas recetas familiares tradicionales con las que pueden enseñar a cocinar a los niños, además de aprender sobre los ingredientes y el porqué son las favoritas de la familia.
• Leer juntos cuentos y fábulas. Los abuelos pueden leer cuentos cortos a los niños porque les ayuda a desarrollar habilidades de lectura y amor por los libros.
• Proyectos de manualidades sencillas. Pueden ser desde pintura hasta jardinería, además de ser divertido, ayuda a los niños a desarrollar habilidades motoras finas.
• Salir a pasear al aire libre. Una buena idea es pasear en el parque local o ir al zoológico o museo; estas excursiones se convierten en la oportunidad ideal para que los niños aprendan de los abuelos mientras exploran su alrededor.

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